Día 3 y último de mi viaje a Portugal: Trienal no Alentejo.
Martes 30, 10.30h Reguengos de Monsaraz. Auditorio. Proyección de HUNGER
Otro amanecer en el Alentejo. En el desayuno con el escritor gastronómico y canario, Mario Hernández Bueno y Nely Concheiro, madre de José Peña y distribuidora del albariño Ramón Peña en claro homenaje a las excelentes conservas de pescado a las que ha dedicado su anterior vida, la pregunta es inevitable: veremos alguna película antes de partir hacia Lisboa?
Sí, cuando ya hemos perdido la esperanza nos apuran hacia el cine, por fin, se va a proyectar Hunger, un documental muy interesante, de una plasticidad inconmensurable. Una exhibición de performances con panes, maíz o patos que inquieta y alegra el alma. Los protagonistas dan qué pensar. Su actuación, los distintos shows que montan, también.
12h Auditorio Reguengos de Monsaraz. Cata de vinos portugueses.
Aún quedan varias catas, pero yo me despido con la de Diego Bonnel y François Gilbert, editor y fundador respectivamente de la revista Gilbert Gallard.
Voy a perderme la siempre provocadora conferencia del restaurador Arturo Pardos, “arquitecto del caos” y autor entre otros del magistral libro, “Dios no Fuma”. Stephan Guerin, su amada esposa y extraordinaria cocinera en los tiempos de la Gastroteca, aplaudirá por mí, según le encargo al oído.
Paz Ivison y Fernando Oldenburg, también me dejan con la miel en los labios pero el avión no espera y mis hijos empiezan a desesperar…
De vuelta a Lisboa, en coche, y durante los 140 kilómetros que separan Reguengos de Monsaraz del aeropuerto voy pensando en lo buena que es la idea de mi amigo André de Quiroga , Conde de Rocamor!
Llevar el arte más transgresor al Portugal más rural, al que localizamos más allá del Tajo, en el Sureste del país luso, el Alentejo, la cuna del esporao, ese vino elaborado en terreno volcánico y de pizarra y aromatizado por la brisa atlántica y las barricas de roble.
Un espacio también privilegiado para producir aceites ligeramente espesos, afrutados y dorados.
André, te tengo que dar la enhorabuena por haber parido una acción de comunicación genial para llamar la atención del gourmet sobre una zona en la que se pueden saborear las sopas del cazón que no quieren los vecinos del Algarve, las migas (un majado de ajo, cilantro y sal gorda al que se le añade pan, agua y pescados o carnes), el ensopado de cordero o el pulpo a lagareiro.
Los dulces conventuales, con nueces y miel, o con yemas y cabello de ángel son divinos, sin ninguna duda.
Subiendo al avión me relamo y sonrío:
Reclamo surrealista este del Conde de Rocamor, que se ha propuesto exhibir obras de artistas como el performance japonés ,Satsumi Orimoto en bodegas, lagares, viñas y olivares del Alentejo portugués desde Junio hasta Octubre del 2013.
Una extraordinaria alianza fruto de sus tres pasiones, el arte contemporáneo, la buena mesa y la mercadotecnia. A su lado siempre, la discreta y ejecutiva Filomena, compañera imprescindible de andanzas estrambóticas
que divulgan las excelencias gastronómicas de un destino turístico con huellas romanas y árabes en los que el paseo entre castillos y conventos es más, que en otros lugares, una experiencia mágica .
Y lo digo con conocimiento; porque acabo de venir de allí y de disfrutar de la ruralidad en estado puro, de una luz incomparable y de la bonhomía de unas gentes entrañables que cantan en la calle y guisan con todo el tiempo del mundo.
Si decidís escaparos este verano hasta el Algarve, no dejéis de visitar también el Alentejo. Yo me he quedado con muchas ganas de conocer Marvao, Borba, Mifontes…y la ciudad patrimonio de la Humanidad, Evora.
Allí creo que he hecho amigos, (las cosas del comer y del beber unen mucho en muy poco tiempo) que me recomiendan dónde descubrir los sabores del Portugal más rural en próximos viajes. Los comparto con vosotros y ojalá coincidamos pronto.
O espalha brasas. Aldeia de Sande-Borba
“conejo al horno”
Os gemeos Río de monihos-Borba.
“caza”
O Xana. Aldeia de Serra-Redondo
“cocina tradicional del Alentejo”
Adega do Isaias. Estremoz
“carrillera de cerdo con su hueso al horno”
Pipa Rosa. Rua alcarcova de Baixo-Evora
“tapas”